Ciencia y Educación (ISSN 2707-3378)
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ROL QUE DESEMPEÑA EL PERSONAL DE SALUD EN LA SEGURIDAD DEL
PACIENTE.
ROLE OF HEALTH STAFF IN PATIENT SAFETY.
Autores: ¹Elisa María Álava Mariscal, ²Lídice Lorena Otero Tobar, ³Mariana Del Roció Mora
Montenegro y
4
Ana Lucia Mora Mora
Articulo recibido: 27 de Abril del 2019
Articulo revisado: 2 de Mayo del 2019
Articulo aprobado: 14 de Junio del 2019
¹Doctorando en Ciencias de la Salud por la Universidad Luz de Zulia en la República Bolivariana de Venezuela.
²Licenciada en Enfermería egresada de la Universidad Técnica de Babahoyo (Ecuador) con 17 años de experiencias laboral. Obtuvo una
maestría mención Gerencia de Servicios de la Salud en la Universidad Técnica de Babahoyo (Ecuador).
³Licenciada en enfermería egresada de la Universidad Técnica de Babahoyo (Ecuador) con 16 años de experiencia dentro de la psicología.
Posee una maestría en la Universidad Técnica de Babahoyo (Ecuador), mención Gerencia de Servicios de Salud.
4
Tecnólogo Médico en la Especialización de Terapia Física y Rehabilitación egresada de la Universidad Técnica de Babahoyo (Ecuador)
con 17 años de experiencia laboral. Obtuvo una maestría en Educación Especial con mención en Educación de las Personas con
Discapacidad Visual en la Universidad Técnica de Babahoyo (Ecuador).
Resumen
La seguridad del paciente es un componente
esencial y vital de la atención de enfermería de
calidad. Sin embargo, el sistema de salud es
propenso a errores y puede ser perjudicial para
la atención segura del paciente, como resultado
de fallas en los sistemas básicos. Una variedad
de partes interesadas (sociedad en general;
pacientes; enfermeras individuales; educadores
de enfermería, administradores e
investigadores; médicos; gobiernos y cuerpos
legislativos; asociaciones profesionales; y
agencias de acreditación) son responsables de
garantizar que la atención al paciente se brinde
de manera segura y que no se produzcan daños
les ocurre a los pacientes. Se discute la
responsabilidad de estas partes interesadas en
abordar la seguridad del paciente en el contexto
de una escasez de enfermeras, junto con las
acciones específicas que han tomado y pueden
continuar tomando para promover una atención
segura.
Palabras claves: Seguridad del paciente,
atención de enfermería, acciones específicas.
Abstract
Patient safety is an essential and vital
component of quality nursing care. However,
the healthcare system is prone to errors and can
be detrimental to safe patient care, as a result of
failures in basic systems. A variety of
stakeholders (society at large; patients;
individual nurses; nurse educators,
administrators, and researchers; physicians;
governments and legislative bodies;
professional associations; and accrediting
agencies) are responsible for ensuring that
patient care is provided in an appropriate
manner. safe and harmless way happens to
patients. The responsibility of these
stakeholders to address patient safety in the
context of a nursing shortage is discussed,
along with the specific actions they have taken
and can continue to take to promote safe care.
Keywords: Patient safety, nursing care,
specific actions.
Sumário
A segurança do paciente é um componente
essencial e vital da assistência de enfermagem
de qualidade. No entanto, o sistema de saúde
está sujeito a erros e pode ser prejudicial para o
atendimento seguro ao paciente, como
resultado de falhas nos sistemas básicos. Uma
variedade de partes interessadas (sociedade em
geral; pacientes; enfermeiros individuais;
enfermeiros educadores, administradores e
pesquisadores; médicos; governos e órgãos
legislativos; associações profissionais; e
agências de credenciamento) são responsáveis
por garantir que o atendimento ao paciente seja
fornecido de maneira adequada. maneira
segura e inofensiva acontece aos pacientes. A
responsabilidade dessas partes interessadas em
abordar a segurança do paciente no contexto de
uma escassez de enfermagem é discutida,
juntamente com as ações específicas que eles
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tomaram e podem continuar a tomar para
promover um cuidado seguro.
Palavras-chave: Segurança do paciente,
cuidados de enfermagem, ações específicas.
Introducción
La seguridad del paciente es un componente
esencial y vital de una atención de calidad. Sin
embargo, los proveedores de atención médica
enfrentan muchos desafíos en el entorno de
atención médica actual para tratar de mantener
seguros a los pacientes. Este artículo describirá
lo que han hecho una variedad de personas y
grupos, y lo que aún queda por hacer, para
promover una atención segura para todos.
Se dice que el error ocurre cuando una
secuencia planificada de actividades mentales o
físicas no logra el resultado deseado y cuando
esta falla no puede atribuirse a alguna
intervención u ocurrencia fortuita. Ramos
Domínguez (2005) señaló los siguientes
ejemplos de errores en la atención médica:
El 28% de las reacciones adversas a los
medicamentos y el 42% de los eventos que
amenazan la vida en el cuidado de la salud
se pueden prevenir.
El 20% de los pacientes de los centros
médicos de tercer nivel experimentan
efectos adversos.
Entre el 10 y el 30% de los resultados de las
pruebas de laboratorio se clasifican
inadecuadamente como normales. (Ramos
Domínguez, 2005)
Padilla (2020) describió el sistema de atención
médica de Ecuador como fracturado, propenso
a errores y perjudicial para la atención segura
del paciente. Definió la seguridad del paciente
como la ausencia de lesiones accidentales y
afirmó además que garantizar la seguridad del
paciente implica el establecimiento de sistemas
y procesos operativos que minimicen la
probabilidad de errores y maximicen la
probabilidad de interceptarlos cuando ocurran.
Padilla (2020) también ha propuesto seis
objetivos de mejora y diez reglas para rediseñar
el sistema de atención de la salud para hacerlo
más seguro. Los seis objetivos son:
Seguridad: evitar lesiones a los pacientes
por la atención que se pretende ayudarlos.
Eficaz: proporcionar servicios basados en
conocimientos científicos a todos los que
podrían beneficiarse y abstenerse de prestar
servicios a aquellos que probablemente no
se beneficiarán.
Centrado en el paciente: brinda atención
que es respetuosa y responde a las
preferencias, necesidades y valores del
paciente, y garantiza que los valores del
paciente guíen todas las decisiones clínicas.
Oportuna: reduciendo las esperas y, a
veces, las demoras perjudiciales tanto para
quienes reciben como para quienes brindan
atención.
Eficiente: evita el desperdicio, incluido el
desperdicio de equipos, suministros, ideas
y energía.
Equitativo: brindar atención que no varía
en calidad debido a características
personales como el género, la ubicación
geográfica y el nivel socioeconómico
(Padilla, 2020).
Una de las reglas agrega la seguridad como una
propiedad del sistema. Esta regla requiere que
los pacientes estén a salvo de las lesiones
causadas por el sistema de atención y que se
preste más atención a prevenir y mitigar los
errores.
Trejo (2020) expreso que es hora de abordar la
trinidad impía de las lesiones de los pacientes y
los errores de atención médica, la escasez de
personal y la inminente escasez de enfermeras.
Siendo necesario conocer el impacto sobre las
enfermeras y la seguridad del paciente de un
ambiente laboral donde las enfermeras están
estresadas, fatigadas, incapaces de usar sus
habilidades de pensamiento crítico,
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predispuestas a accidentes, enfermedades y
lesiones relacionadas con el lugar de trabajo e
involucradas en incidentes de errores de
medicación. Trejo (2020) declaró que si no se
abordan los problemas en el entorno laboral, las
enfermeras no podrán proteger suficientemente
a los pacientes.
Desarrollo
¿Quién es responsable de garantizar la
seguridad del paciente?
En última instancia, todas las partes interesadas
son responsables de que los pacientes no sufran
ningún daño. Estos interesados incluyen: la
sociedad en general; pacientes; enfermeras
individuales; educadores, administradores e
investigadores de enfermería; médicos
gobiernos, incluidos órganos legislativos y
reguladores; asociaciones profesionales; y
agencias de acreditación. Este artículo
describirá la responsabilidad que estas diversas
partes interesadas han asumido al abordar la
seguridad del paciente.
Sociedad en general
Es difícil abordar la seguridad del paciente sin
reconocer la escasez actual de enfermeras y su
impacto en la práctica. La fuerza laboral de
enfermeras registradas está envejeciendo a
corto plazo y se está reduciendo a largo plazo
(Padilla, 2020). La escasez de enfermeras pone
en peligro la calidad de la atención, pone a los
pacientes en riesgo y, en última instancia,
podría socavar toda la industria de la atención
médica.
El sistema de salud en el Ecuador ha soportado
durante mucho tiempo escaseces cíclicas de
enfermeras. A partir de estas pasadas escaseces
se ha demostrado que hay formas de aliviar el
problema. Tales intervenciones incluyen: hacer
cambios en las horas de trabajo; aumentar las
bonificaciones financieras por empleo, salarios,
becas y subvenciones para apoyar la educación;
atraer a segundas carreras a la profesión;
contratación de enfermeras de otros países;
ofrecer diferenciales salariales e incentivos para
el trabajo por turnos y la enfermería
especializada; realizar cambios en las
modalidades de práctica; y contar con
instalaciones y administradores brinda un
mayor reconocimiento a las contribuciones del
personal de enfermería. (Román Huera, 2020)
Será importante para toda la sociedad trabajar
para mejorar la comunicación entre las
enfermeras de atención directa y la gerencia y
administración de enfermería, promover la
flexibilidad de la dotación de personal y la
utilización de fórmulas adecuadas de dotación
de personal, desalentar el uso de horas
extraordinarias obligatorias, proporcionar una
compensación adecuada, minimizar los
peligros, promover la seguridad en el lugar de
trabajo e implementar nuevas tecnologías que
automaticen tareas no valoradas. Establecer el
título de bachillerato como nivel de entrada a la
práctica profesional de enfermería
proporcionará los conocimientos necesarios
para respaldar una atención de enfermería cada
vez más compleja. Asimismo, se consideran
necesarios un mayor apoyo tecnológico, la
reducción de trámites innecesarios y
duplicados, la contratación de hombres y
minorías étnicas y raciales, y la mejora de la
imagen de la enfermería en los medios y el
público. (Reyes, 2020)
Pacientes
En el pasado, los pacientes solían ser receptores
pasivos de atención médica. Las explicaciones
de enfermedades y afecciones, pruebas de
diagnóstico, intervenciones quirúrgicas,
medicamentos y otros tratamientos a menudo
no se entendieron o cuestionaron con claridad.
Los pacientes veían a sus profesionales de la
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salud (médicos, enfermeras, farmacéuticos,
terapeutas y otros proveedores) como todos
conocedores y, sin lugar a duda, competentes y
seguros. (Ruiz-Moral, 2020)
En las últimas dos décadas esto ha cambiado.
Hoy en día, la mayoría de las instituciones de
atención médica y los médicos trabajan para
garantizar ciertos derechos de los pacientes,
como el derecho a una educación clara y
adecuada sobre enfermedades y tratamientos, a
fin de respaldar las decisiones informadas por el
paciente. Los pacientes a menudo buscan
oportunidades para opiniones adicionales sobre
intervenciones apropiadas y designan
representantes de atención médica o atención
directa donde los pacientes son participantes
cada vez más activos en su cuidado. (Andrade,
2020)
Los pacientes informados pueden hacer mucho
para aumentar la seguridad de su atención.
Pueden preguntar sobre las credenciales y
competencias de los profesionales de la salud
que brindan atención y exigir la prestación de
atención por parte de profesionales de la salud
con la educación y la licencia adecuadas. Es
necesario ayudar a los pacientes a comprender
la necesidad de contar con enfermeras tituladas
que supervisen su atención. Además, los
pacientes pueden solicitar que los centros de
atención médica proporcionen información que
describa índices como resultados de la atención
del paciente por afecciones médicas e
intervenciones quirúrgicas, error médico tasas,
tasas de infección nosocomial, proporciones de
personal de enfermería a pacientes,
disponibilidad de personal de apoyo, tasas de
morbilidad y mortalidad, duración de las
estadías de pacientes con ciertas afecciones,
oportunidades para la planificación previa a la
admisión y el alta, e incidentes de negligencia.
(Mora, 2020)
Enfermeras
La enfermería es una profesión basada en el
conocimiento. La base de la práctica científica
de la enfermería incluye la ciencia de la
enfermería; las ciencias biomédicas, físicas,
económicas, del comportamiento y sociales;
ética; y filosofía. La capacidad de una
enfermera para ser un pensador crítico y utilizar
este conocimiento en la prestación de cuidados
de enfermería es esencial para el bienestar y la
seguridad de aquellos a quienes las enfermeras
atienden (Sánchez, 2020)
Al principio de la historia de la enfermería,
Florence Nightingale abogó por una atención
segura. Propuso que las enfermeras a través de
su práctica tenían que poner al paciente en las
mejores condiciones posibles para que la
naturaleza actuara sobre él. Al discutir la
práctica de la enfermería contemporánea, Saltos
(2020) afirma que una característica esencial de
la enfermería es la provisión de una relación de
cuidado que facilita la salud y la curación.
Nightingale realizó algunos de los primeros
estudios de enfermería sobre los factores que
influyen en los resultados de la atención al
paciente (Nightingale, 1895). Es importante que
las enfermeras trabajen para continuar con estas
tradiciones fortaleciendo la relación enfermera-
paciente y utilizando diligentemente los
resultados de la investigación para brindar una
atención segura a los pacientes. (Saltos, 2020)
Las leyes, reglas y estándares también pueden
mejorar la atención segura. Las enfermeras son
responsables de seguir las leyes, reglamentos y
reglas de la autoridad que otorga las licencias y
las normas y la ética de la profesión
promulgadas por las diversas asociaciones de
enfermería. Estas leyes, reglas y estándares
incluyen cumplir con los requisitos educativos,
mantener la competencia en la práctica y
abstenerse de participar en cualquier acto de
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mala conducta profesional, como abusar de un
paciente; practicar de manera incompetente,
fraudulenta o estando incapacitado; no
documentar adecuadamente; revelar
información de identificación personal sobre un
paciente; y la delegación inapropiada de actos
profesionales (Saltos, 2020).
Las enfermeras también pueden mejorar la
atención segura actuando como líderes de
equipo competentes. La prestación de cuidados
de enfermería a los pacientes suele ser un
esfuerzo de equipo en el que las enfermeras con
experiencia dirigen a las nuevas enfermeras.
Las enfermeras con experiencia deben conocer
las competencias, los parámetros legales y las
tareas que pueden realizar otros. Trejo (2020)
desarrolló una lista de seis factores de riesgo
(potencial de daño; condición, estabilidad del
paciente; complejidad de la tarea; nivel de
resolución de problemas o innovación que
podría ser necesaria; imprevisibilidad del
resultado y el nivel de interacción requerido con
el paciente para completar con éxito la tarea).
Las enfermeras con experiencia deben
proporcionar los niveles apropiados de
dirección y supervisión cuando otros brindan
atención de enfermería para que el paciente
reciba una atención segura y competente. (Ruiz-
Moral, 2020)
Es responsabilidad profesional de una
enfermera permanecer segura y competente
siendo un aprendiz de por vida. Es importante
tomar decisiones informadas sobre el avance
educativo y clínico y la certificación de
especialidad. Las opciones educativas pueden
incluir cursos de educación continua o
programas de grado avanzado. El avance clínico
puede incluir convertirse en una enfermera con
una especialidad dentro de un área de atención,
como una enfermera practicante, una enfermera
clínica especializada, una enfermera
anestesista, o la decisión de especializarse en un
campo particular de enfermería a través de la
educación continua y la práctica clínica.
Las enfermeras profesionales pueden demostrar
competencia y experiencia en la práctica de la
enfermería al buscar la certificación en un área
clínica (como pediatría, médico-quirúrgico o
salud psiquiátrica-mental) o en un rol específico
(como administrador, especialista en
informática o educador en desarrollo del
personal). La certificación generalmente
requiere la finalización de un programa
educativo acreditado en la especialidad,
recomendaciones de colegas profesionales y
aprobar un examen de certificación
administrado por una Institución de Educación
Superior o una asociación de enfermería
especializada. (Padilla, 2020)
Identificar los riesgos potenciales y aprender la
terminología adecuada para identificar y
describir los errores de atención médica
también promueve una atención segura. Es muy
probable que estas actividades ocurran en un
entorno no punitivo donde las enfermeras se
sientan seguras y respaldadas al informar
errores o identificar necesidades. Se ha
estudiado el impacto de la dotación de personal
de enfermería sobre la seguridad del paciente y
se ha demostrado que es significativo (Padilla,
2020). Los entornos de práctica que apoyan la
práctica profesional con una gestión de
enfermería receptiva, personal y programación
creativos, salarios y beneficios adecuados,
disponibilidad de preceptores clínicos, apoyo
técnico y auxiliar adecuado y acceso al
desarrollo y la educación del personal brindan
el entorno en el que las enfermeras pueden
identificar las amenazas para seguridad del
paciente (Román Huera, 2020).
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Educadores, administradores e investigadores
de enfermería
Las enfermeras en puestos de liderazgo también
tienen la responsabilidad de promover una
atención segura. Las responsabilidades y
contribuciones de los líderes, como educadores,
administradores e investigadores, se describen a
continuación.
Educadores de enfermería. Las enfermeras
están preparadas para atender de manera
competente y segura a los pacientes al
completar un programa de enfermería (diploma,
grado asociado o bachillerato) que está
acreditado por la SENESCYT. Los educadores
de enfermería en todos los programas
desarrollan las habilidades de pensamiento
crítico que son esenciales en la capacidad de la
enfermera para identificar problemas o riesgos
actuales o potenciales que afectan la seguridad
del paciente. También enseñan las bases
teóricas de las acciones de enfermería y los
comportamientos profesionales que brindan a
los estudiantes de enfermería una base para la
prevención de errores en la atención de la salud.
(Román Huera, 2020)
Administradores del área de enfermería. Los
administradores y gerentes de enfermería
evalúan a diario sistemáticamente las dinámicas
complejas que influyen en la capacidad de las
enfermeras para ejercer en diferentes entornos
de atención de la salud. También desarrollan
políticas y procedimientos para dirigir la
práctica de enfermería segura y proporcionan
educación a las enfermeras con respecto a la
interpretación e implementación de estas
políticas y procedimientos. La disponibilidad de
los departamentos de desarrollo del personal es
un factor crítico para ayudar a las enfermeras a
utilizar estas políticas y procedimientos para
brindar una atención segura y competente.
(Herdoiza Chichande, 2020)
Los administradores y gerentes de las áreas de
enfermería también pueden aumentar la
seguridad del paciente fomentando un entorno
en el que las enfermeras controlen su propia
práctica de enfermería. Los hospitales que
brindan autonomía profesional a las enfermeras
y apoyan el control de la práctica de enfermería
tienen mejores tasas de retención del personal
de enfermería y mejores resultados para los
pacientes
En la investigación realizada por Doicela
(2020) se identificaron las características de los
hospitales que pudieron atraer y retener con
éxito enfermeras profesionales incluso en
tiempos de escasez. Las características de estos
hospitales incluyeron: gestión participativa;
comunicaciones abiertas; liderazgo de calidad;
un director de enfermería a nivel ejecutivo de la
organización; dotación de personal adecuada,
creativa y flexible con proporciones favorables
de enfermeras-pacientes y enfermeras-no
profesionales; salarios y beneficios
competitivos; disponibilidad de departamentos
de educación del personal; escaleras clínicas y
desarrollo profesional; alto valor otorgado a la
enseñanza y la educación; una imagen positiva
de la enfermería; uso de modelos de práctica
profesional; y esfuerzos continuos hacia la
mejora.
Doicela (2020) también señaló que, además de
tasas más bajas de morbilidad y mortalidad,
estadías más cortas y menor utilización de los
días en la UCI, estos hospitales de referencia
presentaban las tasas de incidencia más bajas de
lesiones por pinchazos con agujas entre las
enfermeras. Los hospitales con características
de hospitales proporcionan un entorno de
práctica en el que el personal de enfermería
puede identificar formas de eliminar o reducir
errores, riesgos y resultados negativos.
(Doicela, 2020)
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Investigadores. La investigación en enfermería
ha hecho una contribución significativa a la
seguridad del paciente al identificar la
necesidad de personal adecuado. Se ha
demostrado que la dotación de personal de
enfermería adecuada es fundamental para la
prestación de una atención de calidad al
paciente porque permite tiempo para la
evaluación de enfermería adecuada de los
pacientes. Un estudio de Trejo (2020) encontró
que los resultados adversos de los pacientes,
como neumonía, infecciones posoperatorias,
úlceras por presión, infecciones del tracto
urinario y estadías hospitalarias, se redujeron
cuando los niveles de personal de enfermería
eran más altos (Trejo, 2020).
Un estudio de Solórzano Garcés (2020)
encontró que una mayor proporción de horas de
atención por día y una mayor cantidad absoluta
de horas de atención por día proporcionadas por
enfermeras se asociaron con mejores resultados
para los pacientes. Solórzano Garcés ha
correlacionado el aumento de la carga de trabajo
de enfermería con una mayor probabilidad de
muerte del paciente. Santa Isaza (2020) ha
demostrado que un aumento del 10% en la
dotación de personal de enfermería se asoció
con menos eventos adversos para los pacientes.
Los investigadores también han observado que
la certificación se puede utilizar como indicador
de competencia. En un estudio realizado por de
Padilla (2020), las enfermeras informaron los
siguientes tipos de práctica de enfermería
posterior a la certificación:
El 51% informa una mayor confianza en
la práctica.
El 35% describe una mayor confianza en
la capacidad de toma de decisiones.
El 28% informa más confianza en la
capacidad de detectar complicaciones.
El 23% informa que la comunicación y la
colaboración con otros profesionales
sanitarios son más eficaces.
El 6% informa menos eventos adversos y
errores en la atención al paciente que
antes de ser certificados (Padilla, 2020).
Es necesario continuar la investigación para
determinar el impacto de las relaciones médico-
enfermero, la autonomía profesional y el control
de la enfermera registrada sobre el entorno de la
práctica sobre la mejora de la práctica
profesional y la prestación más segura de la
atención al paciente. También se necesita
investigación que identifique el efecto de los
sistemas de notificación no punitivos sobre los
errores de atención médica.
Médicos
Los médicos tienen una larga trayectoria en el
seguimiento de los resultados de los pacientes
con respecto a tratamientos médicos e
intervenciones quirúrgicas. Athié-Gutiérrez,
(2020) identifica la eliminación de los errores
de los sistemas de salud como una alta prioridad
para los ministerios de salud y las instituciones
hospitalarias, aumentando la ética dentro de la
profesión médica. Athié-Gutiérrez, (2020) insta
a los hospitales, médicos, enfermeras,
farmacéuticos, compañías farmacéuticas,
hogares de ancianos y otros a trabajar juntos
para identificar y corregir problemas en todo el
sistema que causan errores o resultados
adversos para los pacientes.
Conclusiones
Los pacientes tienen derecho a una atención
segura y de calidad. Muchas partes interesadas
están trabajando para mejorar la atención segura
para todos. Este artículo ha revisado lo que estas
partes interesadas ya han hecho para promover
una atención segura y sugiere actividades
adicionales que pueden mejorar aún más la
seguridad de nuestra atención para futuros
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pacientes. Las enfermeras están desempeñando
y seguirán desempeñando un papel continuo en
el movimiento para promover una atención
segura siendo una rama clave de la red de
seguridad sanitaria.
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Mariscal, Lídice Lorena Otero Tobar, Mariana Del
Roció Mora Montenegro y Ana Lucia Mora Mora