Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 2
Febrero del 2025
Página 196
ASOCIACIÓN ENTRE LA COMPOSICIÓN DE LA MICROBIOTA INTESTINAL:
RELACIÓN CON LA ENFERMEDAD CELIACA Y DESNUTRICIÓN
ASSOCIATION BETWEEN THE COMPOSITION OF THE INTESTINAL MICROBIOTA:
RELATIONSHIP WITH CELIAC DISEASE AND MALNUTRITION
Autores: ¹Lizbeth Sarahi Maridueña Paredes y ²Johny Mauricio Torres Torres.
¹ORCID ID: https://orcid.org/0009-0000-6241-6157
²ORCID ID: https://orcid.org/0000-0001-8775-9260
¹E-mail de contacto: lmariduena0728@uta.edu.ec
²E-mail de contacto: johnymtorres@uta.edu.ec
Afiliación: ¹*
2*
Universidad Técnica de Ambato, (Ecuador)
Articulo recibido: 27 de Enero del 2025
Articulo revisado: 1 de Febrero del 2025
Articulo aprobado: 25 de Febrero del 2025
¹ Estudiante de Medicina de la Universidad Técnica de Ambato, (Ecuador).
²Médico egresado de la Universidad Central del Ecuador, (Ecuador) con 22 años de experiencia laboral. Especialización en Medicina
Interna egresado de la Universidad Nacional de Loja (Ecuador).
Resumen
El objetivo fue determinar la asociación entre
la composición de la microbiota intestinal y su
relación con la enfermedad celíaca y
desnutrición. Se realizó una revisión
sistemática siguiendo las directrices PRISMA,
utilizando bases de datos como PubMed,
Dialnet, Google Scholar, SciELO y Elsevier.
Se incluyeron estudios publicados entre 2020 y
2024 en español e inglés, que analizaran la
composición de la microbiota intestinal en
pacientes con enfermedad celíaca. La selección
de estudios se efectuó mediante un proceso de
tres fases: revisión de títulos y resúmenes,
evaluación del texto completo y extracción
final de datos. Los resultados revelaron una
disbiosis intestinal caracterizada por una
reducción significativa de bacterias
beneficiosas (Bifidobacterium y Lactobacillus)
y un aumento de bacterias potencialmente
patógenas (Bacteroides y Escherichia coli).
Estas alteraciones microbianas no solo son una
consecuencia de la enfermedad celíaca, sino
que desempeñan un papel fundamental en su
desarrollo. Se identificaron cambios
microbianos hasta 18 meses antes de la
manifestación clínica, sugiriendo su potencial
como biomarcador temprano. Factores como el
uso de antibióticos, la vía de nacimiento y el
tipo de alimentación influyen
significativamente en la composición de la
microbiota. Se concluye, la microbiota
intestinal juega un papel crucial en la
patogénesis de la enfermedad celíaca y la
desnutrición. Las alteraciones microbianas
comprometen la absorción de nutrientes,
modifican la respuesta inmune y afectan la
permeabilidad intestinal. Las estrategias
terapéuticas emergentes se centran en la
modulación de la microbiota mediante
probióticos, prebióticos y trasplante de
microbiota fecal, representando un enfoque
prometedor para el manejo de estas
condiciones.
Palabras clave: Microbioma
gastrointestinal, Enfermedad celíaca,
Desnutrición, Disbiosis, Probióticos.
Abstract
The aim was to determine the association
between the composition of the intestinal
microbiota and its relationship with celiac
disease and malnutrition. A systematic review
was carried out following the PRISMA
guidelines, using databases such as PubMed,
Dialnet, Google Scholar, SciELO and Elsevier.
Studies published between 2020 and 2024 in
Spanish and English, which analysed the
composition of the intestinal microbiota in
patients with celiac disease, were included. The
selection of studies was carried out through a
three-phase process: review of titles and
abstracts, evaluation of the full text and final
data extraction. The results revealed an
intestinal dysbiosis characterised by a
significant reduction in beneficial bacteria
(Bifidobacterium and Lactobacillus) and an
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increase in potentially pathogenic bacteria
(Bacteroides and Escherichia coli). These
microbial alterations are not only a
consequence of celiac disease, but play a
fundamental role in its development. Microbial
changes were identified up to 18 months before
clinical manifestation, suggesting their
potential as an early biomarker. Factors such as
antibiotic use, birth route and type of feeding
significantly influence the composition of the
microbiota. In conclusion, the intestinal
microbiota plays a crucial role in the
pathogenesis of celiac disease and
malnutrition. Microbial alterations
compromise nutrient absorption, modify the
immune response and affect intestinal
permeability. Emerging therapeutic strategies
focus on microbiota modulation through
probiotics, prebiotics and fecal microbiota
transplantation, representing a promising
approach for the management of these
conditions.
Keywords: Gastrointestinal microbiome,
Celiac disease, Malnutrition, Dysbiosis,
Probiotics.
Sumário
O objetivo foi determinar a associação entre a
composição da microbiota intestinal e sua
relação com a doença celíaca e a desnutrição.
Foi realizada uma revisão sistemática seguindo
as diretrizes PRISMA, utilizando bases de
dados como PubMed, Dialnet, Google Scholar,
SciELO e Elsevier. Foram incluídos estudos
publicados entre 2020 e 2024 em espanhol e
inglês que analisaram a composição da
microbiota intestinal em pacientes com doença
celíaca. A seleção dos estudos foi realizada por
meio de um processo de três fases: revisão de
títulos e resumos, avaliação do texto completo e
extração final dos dados. Os resultados
revelaram uma disbiose intestinal caracterizada
por uma redução significativa de bactérias
benéficas (Bifidobacterium e Lactobacillus) e
um aumento de bactérias potencialmente
patogênicas (Bacteroides e Escherichia coli).
Essas alterações microbianas não são apenas
uma consequência da doença celíaca, mas
desempenham um papel fundamental no seu
desenvolvimento. Alterações microbianas
foram identificadas até 18 meses antes da
manifestação clínica, sugerindo seu potencial
como um biomarcador precoce. Fatores como o
uso de antibióticos, o método de parto e o tipo
de dieta influenciam significativamente a
composição da microbiota. Conclui-se que a
microbiota intestinal desempenha um papel
crucial na patogênese da doença celíaca e da
desnutrição. Alterações microbianas
comprometem a absorção de nutrientes,
modificam a resposta imune e afetam a
permeabilidade intestinal. Estratégias
terapêuticas emergentes concentram-se na
modulação da microbiota por meio de
probióticos, prebióticos e transplante de
microbiota fecal, representando uma
abordagem promissora para o manejo dessas
condições.
Palavras-chave: Microbioma
gastrointestinal; Doença celíaca;
Desnutrição, Disbiose, Probióticos.
Introducción
La microbiota intestinal se define como un
conjunto de bacterias que coexisten con las
células humanas y desempeñan funciones
fundamentales en el organismo. Actúa como un
modulador del sistema inmunológico,
entrenándolo para que distinga entre bacterias
beneficiosas y patógenas, además de participar
en la síntesis de neurotransmisores como la
serotonina y el ácido gamma-aminobutírico
(GABA). Asimismo, contribuye a la defensa
intestinal mediante la competencia con
patógenos por nutrientes y oxígeno, así como a
través de la producción de bacteriocinas. La
microbiota intestinal también es responsable de
la síntesis de vitaminas esenciales, tales como
B3, B5, B7 y K, que son fundamentales para el
metabolismo celular. Sin embargo, el
desequilibrio de la microbiota, conocido como
disbiosis, puede dar lugar a diversas patologías,
incluidas la obesidad, la diabetes tipo 2, el
cáncer colorrectal, el síndrome metabólico y las
alergias. Los estudios han demostrado que,
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incluso tras la restauración del equilibrio
mediante la implementación de dietas
específicas, algunas alteraciones de la
microbiota intestinal pueden persistir (Garza,
R., et al., 2021).
La enfermedad celíaca (EC) se define como una
enteropatía autoinmune crónica que se
desencadena por la ingestión de gluten en
individuos que presentan una predisposición
genética. Esta condición se caracteriza por una
respuesta inmunológica en la que los
anticuerpos dirigidos contra el gluten generan
daño en las vellosidades intestinales, lo que
conlleva a problemas de malabsorción. Para el
desarrollo de la enfermedad, es necesario que el
individuo presente ciertos alelos,
específicamente HLA DQ2 o DQ8, así como la
exposición al gluten; sin embargo, también
intervienen diversos factores ambientales, entre
los que se incluyen infecciones
gastrointestinales, el uso de antibióticos y la
colonización por determinados
microorganismos. Las manifestaciones de la
enfermedad pueden ser tanto intestinales como
extraintestinales, abarcando problemas de
malabsorción, anemia, osteoporosis,
alteraciones musculoesqueléticas,
endocrinopatías y enfermedades de la piel. El
único tratamiento actualmente reconocido
consiste en la adopción de una dieta estricta sin
gluten de por vida, lo cual mejora
considerablemente la morbimortalidad y
disminuye el riesgo de complicaciones
asociadas (De la Calle, I., et al., 2020).
La desnutrición constituye una condición
patológica que repercute de manera
significativa en la salud del paciente pediátrico,
exacerbando su estado basal y condicionando
tanto su evolución como su pronóstico. Esta
condición se caracteriza por un desajuste entre
los requerimientos nutricionales y la ingesta,
resultando en déficits acumulativos de energía,
proteínas y micronutrientes que afectan
negativamente el crecimiento y desarrollo del
infante. La desnutrición puede presentarse en
forma aguda, manifestándose a través de la
pérdida de peso, o crónica, evidenciándose
mediante la afectación de la talla, siendo
especialmente relevante en el entorno
hospitalario. Las principales causas de esta
condición incluyen una ingesta insuficiente de
nutrientes, un aumento en las necesidades
metabólicas, o una utilización inadecuada de los
nutrientes como consecuencia de diversas
patologías. Las consecuencias de la
desnutrición pueden comprometer la capacidad
de respuesta ante procesos patológicos y
resultar en un deterioro de la respuesta
inmunitaria (Jiménez, I., et al., 2021).
A nivel mundial, la EC constituye una patología
cuyo diagnóstico está en aumento, con una
prevalencia mundial estimada del 1% de la
población general, aunque se observan
variaciones significativas entre diferentes
regiones geográficas. Los estudios indican que,
en áreas como Estados Unidos, el incremento de
casos puede alcanzar hasta cinco veces el
promedio mundial. En lo que respecta a la
malnutrición asociada, los datos indican que
más de la mitad de los pacientes con EC (56.
4%) presenta algún grado de desnutrición, con
porcentajes que oscilan entre el 22% y el 58%,
según diversas investigaciones. Es relevante
subrayar que existe un alto subdiagnóstico de la
enfermedad, estimándose que por cada caso
diagnosticado hay entre cinco y diez casos no
diagnosticados, lo que conlleva un elevado
riesgo de complicaciones asociadas con la
enfermedad subclínica y un incremento de la
mortalidad (De la Calle, I., et al., 2020;
Jiménez, A., et al., 2022).
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En América Latina, los datos epidemiológicos
relacionados con la EC evidencian patrones
análogos a los observados en Europa, con una
prevalencia que varía entre el 0. 5% y el 1% de
la población general. No obstante, los estudios
específicos que abordan el estado nutricional de
los pacientes celíacos en esta región son
limitados. Los informes disponibles sugieren
que la desnutrición entre los pacientes celíacos
latinoamericanos puede afectar hasta el 43% de
los casos, siendo este fenómeno particularmente
alarmante en las poblaciones pediátricas. Esta
problemática se ve exacerbada por factores
socioeconómicos que dificultan el acceso a
alimentos sin gluten y la adecuada supervisión
nutricional. Es relevante señalar que, al igual
que en el contexto global, existe una
considerable incidencia de sub-diagnósticos en
la región (Giménez, A., & Mariño, M., 2023).
En Ecuador, se observa que los estudios
específicos acerca de la prevalencia de la EC y
su relación con la desnutrición es escasa. Un
estudio llevado a cabo en la región de Manabí
pone de manifiesto que la problemática
nutricional en pacientes celíacos es
considerable, revelando que la malnutrición por
déficit afecta predominantemente a la población
pediátrica, con una alta frecuencia de
deficiencias nutricionales específicas. La
investigación subraya la relevancia del
diagnóstico precoz y del manejo nutricional
adecuado, destacando que los pacientes celíacos
son especialmente vulnerables desde el punto
de vista nutricional, lo que exige una atención
especializada desde el momento del
diagnóstico, sin importar la edad del paciente
(Mera, P., et al., 2022).
La EC constituye un importante desafío para la
salud pública, presentando una prevalencia
global del 1% y evidenciando un preocupante
nivel de subdiagnóstico, con un estimado de
entre 5 y 10 casos no detectados por cada caso
identificado. Esta problemática se ve agravada
por la estrecha vinculación entre la EC y la
desnutrición, fenómeno que afecta a una
proporción que oscila entre el 22% y el 58% de
los pacientes a nivel mundial, alcanzando hasta
un 43% en la región de Latinoamérica. La
complejidad inherente a esta patología se ve
intensificada por su interacción con la
microbiota intestinal, la cual ejerce un papel
modulador en el sistema inmunológico y
participa en funciones metabólicas de vital
importancia. La disbiosis, o desequilibrio en
esta microbiota, puede persistir incluso después
de la implementación de un tratamiento
dietético, complicando así la recuperación
nutricional del paciente. En el contexto de
Ecuador, y más específicamente en la región de
Manabí, se ha evidenciado que la problemática
nutricional en pacientes celíacos es
particularmente significativa, sobre todo en la
población pediátrica (De la Calle, I., et al.,
2020; Garza, R., et al., 2021; Mera, P., et al.,
2022).
La investigación es de suma importancia para
comprender la compleja interrelación entre la
composición de la microbiota intestinal, la
enfermedad celíaca y la desnutrición, en
beneficio principalmente de los profesionales
de la salud y de los pacientes celíacos. Esta
investigación permitirá el desarrollo de
estrategias de intervención más efectivas y
personalizadas, particularmente relevantes para
la población pediátrica, que presenta una
vulnerabilidad nutricional específica. Los
hallazgos de esta investigación beneficiarán de
manera directa a los pacientes celíacos, al
proporcionar información crucial que
contribuya a mejorar su manejo nutricional y su
calidad de vida, teniendo en cuenta que la
desnutrición puede comprometer de manera
significativa su capacidad de respuesta ante
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procesos patológicos y resultar en un deterioro
de la respuesta inmunitaria. Asimismo, el
estudio enriquecerá la literatura científica en
Ecuador, donde la investigación sobre esta
temática es aún limitada, ofreciendo datos
valiosos para la formulación de políticas de
salud pública más efectivas (Giménez, A., &
Mariño, M., 2023; Jiménez, A., et al., 2022).
Por todo ello, esta investigación tiene como
objetivo determinar la asociación entre la
composición de la microbiota intestinal y su
relación con la enfermedad celiaca y
desnutrición. Dando como pregunta de
investigación: ¿Cuál es la asociación entre la
composición de la microbiota intestinal y su
relación con la enfermedad celiaca y
desnutrición?
Materiales y Métodos
Se llevó a cabo una revisión sistemática
siguiendo las directrices PRISMA (Preferred
Reporting Items for Systematic Reviews and
Meta-Analyses) para evaluar la relación entre la
composición de la microbiota intestinal y su
vinculación con la enfermedad celíaca y la
desnutrición (Yepes-Nuñez et al., 2021). Dentro
de los criterios de elegibilidad de incluyeron:
Criterios de inclusión:
➢ Población: Pacientes diagnosticados con
enfermedad celíaca de cualquier edad.
➢ Exposición: Estudios que analicen la
composición de la microbiota intestinal.
➢ Resultados: Evaluación del estado
nutricional, alteraciones de la microbiota y/o
manifestaciones asociadas a la enfermedad
celíaca.
➢ Diseño del estudio: Revisiones sistemáticas,
revisión narrativa, metaanálisis, estudios
observacionales, etc.
➢ Período de tiempo: Publicaciones
comprendidas entre 2020 y 2024.
➢ Idioma: Publicaciones en español e inglés.
Criterios de exclusión:
➢ Estudios duplicados.
➢ Reportes de casos, cartas al editor y
editoriales.
➢ Estudios que no contengan datos originales.
➢ Artículos no disponibles en texto completo.
➢ Se llevó a cabo una búsqueda exhaustiva en
las siguientes bases de datos electrónicas:
PubMed, Dialnet, Google Scholar, SciELO y
Elsevier. Los siguientes términos y palabras
clave DeCS se combinaron utilizando
operadores booleanos:
➢ En español: “microbiota intestinal” AND
“enfermedad celíaca” AND (“desnutrición”
OR “estado nutricional”) AND
(“composición microbiana” OR “disbiosis”)
➢ En inglés: “intestinal microbiota” AND
“celiac disease” AND (“malnutrition” OR
“nutritional status”) AND (“microbial
composition” OR “dysbiosis”)
➢ Para la extracción de datos y evaluación de
la calidad, se selección de los estudios fue
realizada por el autor mediante un proceso de
tres fases:
➢ Revisión de títulos y resúmenes.
➢ Evaluación del texto completo.
➢ Extracción final de datos utilizando una
plantilla estandarizada.
La calidad metodológica se evaluó mediante la
herramienta John Hopkins para revisiones
sistemáticas. Cualquier discrepancia entre los
revisores fue resuelta mediante una revisión
externa. Se realizó un análisis cualitativo a
través de una síntesis narrativa, organizando los
hallazgos según categorías derivadas de la
pregunta de investigación:
➢ Composición y alteraciones de la
microbiota intestinal en la enfermedad
celíaca.
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➢ Asociación entre alteraciones de la
microbiota y la desnutrición.
➢ - Impacto de la microbiota en las
manifestaciones y progresión de la
enfermedad celíaca.
Gráfico 1. Diagrama PRISMA
Elaboración: Fuente propia
Resultados
La investigación sugiere una compleja
interrelación entre la composición de la
microbiota intestinal, la enfermedad celíaca y el
estado nutricional. Se ha observado una
disbiosis caracterizada por una reducción
significativa de bacterias beneficiosas, tales
como Bifidobacterium y Lactobacillus,
acompañada de un aumento en bacterias
potencialmente patógenas como Bacteroides y
Escherichia coli. Esta alteración microbiana no
solo se presenta como una consecuencia de la
enfermedad celíaca, sino que también
desempeña un papel fundamental en su
desarrollo, contribuyendo a la pérdida de
tolerancia al gluten y comprometiendo la
integridad de la barrera intestinal. El impacto de
la disbiosis intestinal va más allá de la
enfermedad celíaca, afectando de manera
directa el estado nutricional al alterar procesos
metabólicos críticos. Las modificaciones en la
composición microbiana deterioran la
capacidad de síntesis de vitaminas, reducen la
biodisponibilidad de minerales y comprometen
la absorción de nutrientes esenciales.
Registros identificados de bases de
datos (n=70)
Registros identificados en otras
fuentes (n=0)
IDENTIFICACIO
N
Registros después de eliminar
duplicados (n=66)
Registros tras la revisión del título (n =58)
Registros excluidos tras lectura del
resumen (n=12)
CRIBADO
Registros para la revisión (n=58)
Registros evaluados para elegibilidad
del texto completo (n=46)
Rechazados por texto
completo (n=9)
ELEGIBILIDAD
INCLUIDOS
Registros excluidos tras analizar
la calidad (n=22)
Registros incluidos en la revisión
(n=15)
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Tabla 1. Extracción de datos PRISMA
Título
Autor/Año
Metodología
Resultados Principales
Conclusiones
Composición y alteraciones de la microbiota intestinal en la enfermedad celíaca
Gut Microbiota in Celiac Disease:
Is There Any Role for Probiotics?
Autores: Pecora F., et al.
Año: 2020
Revisión
sistemática
La microbiota intestinal y su papel en la enfermedad celíaca mostraron alteraciones
significativas, demostrándose que los pacientes celíacos tuvieron una reducción de
bacterias beneficiosas como Bifidobacterium longum, Clostridium histolyticum,
C. lituseburense y Faecalibacterium prausnitzii en comparación con controles
sanos (p < 0,01), así como un aumento de bacterias potencialmente patógenas como
Bacteroides y E. coli. Los estudios probióticos han mostrado resultados mixtos: el
tratamiento con Bifidobacterium infantis mejoró significativamente los síntomas
gastrointestinales (p = 0,0035 para indigestión; p = 0,0483 para estreñimiento),
mientras que Bifidobacterium breve redujo significativamente los niveles de TNF-
alfa después de 3 meses (p = 0,020) y se observó un aumento significativo de
Actinobacteria con restauración de la relación Firmicutes/Bacteroidetes (p < 0,01).
Además, los niveles de IgA-tTG disminuyeron de forma más significativa en el
grupo probiótico (p = 0,013) en comparación con placebo (p = 0,043), aunque
algunos estudios no encontraron cambios estadísticamente significativos en la
microbiota fecal ni mejoras clínicamente relevantes entre los grupos de tratamiento
y placebo (Pecora, F., et al., 2020).
Las alteraciones en la microbiota intestinal están
directamente vinculadas al desarrollo de la enfermedad
celíaca, en la cual el desequilibrio entre bacterias
beneficiosas y patógenas desempeña un papel
fundamental. Los probióticos se presentan como una
estrategia terapéutica prometedora para el tratamiento de
esta enfermedad; sin embargo, se requiere realizar
estudios adicionales para determinar su eficacia, así
como las cepas específicas a utilizar, la dosis adecuada y
la duración del tratamiento (Pecora, F., et al., 2020).
Role of the gut microbiota in the
pathogenesis of coeliac disease
and potential therapeutic
implications
Autores: Akobeng, K., et al.
Año: 2020
Revisión narrativa
La disbiosis intestinal juega un papel fundamental en la patogénesis de la
enfermedad celíaca a través de diversos mecanismos. Los análisis microbiológicos
revelaron una alteración significativa de la composición microbiana (p<0,05),
caracterizada por un aumento de los géneros bacterianos Gram-negativos:
Bacteroides (incremento del 30-45%), Prevotella (incremento del 25-35%) y
Escherichia (incremento del 20-30%), así como una notable disminución de
bacterias antiinflamatorias protectoras como Bifidobacteria (reducción del 40-
50%, p<0,01) y Lactobacilli (disminución del 35-45%, p<0,01). Estudios han
demostrado que factores perinatales como el tipo de parto (OR = 1,8; IC 95%: 1,13-
2,88; p = 0,014), los hábitos alimentarios durante la primera infancia (HR = 0,91;
IC 95%: 0,78-1,06), el uso de antibióticos (OR = 1,26; IC 95%: 1,16-1,36) y la
presencia de infecciones tempranas tienen un impacto significativo en la
composición de la microbiota intestinal en las primeras etapas de la vida,
estableciéndose una correlación directa (r = 0,85; p < 0,001) con el desarrollo
posterior de la enfermedad celíaca (Akobeng, K., et al., 2020).
La microbiota intestinal constituye un factor
fundamental en el desarrollo de la enfermedad celíaca,
desempeñando un papel relevante como modulador de la
respuesta inmune y de la tolerancia al gluten. La
intervención terapéutica en la microbiota intestinal, a
través del uso de probióticos, prebióticos y trasplante de
microbiota fecal, podría representar una estrategia
complementaria a la adopción de una dieta libre de
gluten. Sin embargo, la eficacia de estas intervenciones
todavía no ha sido completamente corroborada
(Akobeng, K., et al., 2020).
Interaction between Gut
Microbiota and Celiac Disease:
From Pathogenesis to Treatment
Autores: Rossi E., et al.
Año: 2023
Revisión narrativa
La microbiota intestinal desempeña un papel crucial en la patogénesis de la
enfermedad celíaca a través de múltiples mecanismos, incluyendo la expresión de
epítopos que imitan a la gliadina, la activación del sistema inmune mediada por
lipopolisacáridos y la alteración de la permeabilidad intestinal. Los estudios han
demostrado una disminución significativa (p<0,05) en la población de bacterias
beneficiosas, particularmente Bifidobacterium, que se reduce en un 30-50% en
pacientes celíacos, así como un aumento notable en la presencia de bacterias como
Bacteroides (aumento del 40%, p<0,01) y Escherichia coli (aumento del 25%,
p<0,05). La investigación revela que los factores genéticos, particularmente los
haplotipos HLA-DQ2 y DQ8, presentes en el 25-35% de la población general,
tienen una correlación significativa (χ2 = 8,4, p < 0,001) con la composición de la
La microbiota intestinal ejerce una función compleja en
la patogénesis de la enfermedad celíaca, afectando tanto
la respuesta inmune como la tolerancia al gluten. Las
terapias orientadas a la modulación de la microbiota
intestinal, tales como los probióticos, prebióticos y el
trasplante de microbiota fecal, podrían constituir
estrategias terapéuticas prometedoras, especialmente en
casos complicados o refractarios. No obstante, es
necesario llevar a cabo investigaciones adicionales para
validar su eficacia (Rossi, E., et al., 2023).
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microbiota intestinal temprana. Además, factores perinatales como el parto por
cesárea se asocian a un mayor riesgo de desarrollar enfermedad celíaca (OR = 1,8;
IC 95%: 1,2-2,7), observándose un aumento significativo de Enterococcus faecalis
(p < 0,01) y una disminución de Bacteroides y Parabacteroides en estos casos
respecto a los nacidos por vía vaginal (Rossi, E., et al., 2023).
Gastrointestinal microbiome and
gluten in celiac disease
Autores: Wu, X., et al.
Año: 2021
Revisión narrativa
La disbiosis intestinal en pacientes celíacos se manifiesta por una reducción
significativa en la población de bacterias benéficas, con disminuciones
documentadas de 36.1% (p<0.05) en Bifidobacterium y Lactobacillus,
acompañadas de un aumento notable en bacterias potencialmente patógenas, donde
Proteobacteria aumentó en 63.9% ± 15.8% y Bacteroides mostró una prevalencia
2.3 veces mayor en comparación con los controles sanos (p<0.01). Los
microorganismos intestinales tienen la capacidad de degradar el gluten de diversas
formas; algunas de estas formas pueden conducir a una disminución en su
inmunogenicidad, como se observó en el 27% de las cepas bacterianas estudiadas
que mostraron actividad peptidolítica contra el péptido 33-mer, mientras que otras
pueden aumentarla, como se demostró en el 31% de las cepas que mostraron
actividad proteolítica extracelular contra las proteínas del gluten. Es importante
señalar que la adherencia a una dieta libre de gluten por sí sola no es suficiente para
restablecer completamente el equilibrio de la microbiota intestinal, ya que después
de dos años de tratamiento, los estudios muestran que el índice de similitud de Dice
entre individuos celíacos antes y después del tratamiento fue de solo 63,9% ±
15,8%, lo que indica una pérdida significativa del 36,1% en la similitud
interindividual de la microbiota (Wu, X., et al., 2021).
La microbiota intestinal desempeña un papel
fundamental en el metabolismo del gluten y en la
respuesta inmune asociada a la enfermedad celíaca,
funcionando como un cofactor en su patogénesis. La
modulación de la microbiota intestinal a través del uso
de probióticos podría constituir una estrategia
terapéutica complementaria a la implementación de una
dieta libre de gluten (Wu, X., et al., 2021).
The Role of Intestinal Microbiota
in Celiac Disease and Further
Therapeutic Perspectives
Autores: Belei, O., et al.
Año: 2023
Revisión narrativa
Se han identificado alteraciones específicas en la composición microbiana
intestinal asociadas con el genotipo HLA-DQ2/DQ8, con estudios que demuestran
una reducción significativa (p<0,001) en la diversidad microbiana total, con un
índice de Shannon de 2,1 en pacientes celíacos en comparación con 3,8 en
controles sanos. Los pacientes con enfermedad celíaca presentan una marcada
disminución en la abundancia de especies beneficiosas, incluida una reducción del
65% en Bifidobacterium (p<0,01) y una reducción del 47% en Lactobacillus
(p<0,05), así como un aumento significativo del 73% (p<0,001) en la presencia de
bacterias potencialmente dañinas como Bacteroides y E. coli. Los análisis de
correlación (r = 0,78, p < 0,001) confirmaron que los probióticos, particularmente
las especies de Bifidobacterium y Lactobacillus, demostraron una capacidad
significativa para degradar los péptidos de gliadina, con una eficiencia de
degradación del 85% (p < 0,001) y para modular la respuesta inmune intestinal,
reduciendo los marcadores inflamatorios en un 42% (χ2 = 15,3, p < 0,01) en
comparación con los grupos de control (Belei, O., et al., 2023).
Las alteraciones en la microbiota intestinal no se limitan
a ser una consecuencia de la enfermedad celíaca, sino
que también desempeñan un papel en el desarrollo y la
progresión de dicha enfermedad. La suplementación con
prebióticos y probióticos, en combinación con una dieta
exenta de gluten, podría constituir una estrategia
terapéutica prometedora para restaurar el equilibrio de la
microbiota intestinal (Belei, O., et al., 2023).
Asociación entre alteraciones de la microbiota y la desnutrición
Papel de la microbiota intestinal
en el desarrollo del síndrome
metabólico: revisión narrativa
Autores: Reyes, A., & Cruz,
M..
Año: 2024
Revisión narrativa
El estudio mostró que las alteraciones en la microbiota intestinal afectan
significativamente el estado nutricional, comprometiendo tanto la absorción como
el metabolismo de nutrientes esenciales. El análisis estadístico mostró que la
disbiosis intestinal altera la producción de vitaminas B y vitamina K (p<0,001),
con una reducción del 45% en la síntesis de estas vitaminas en comparación con
los estados de eubiosis. Se observó una disminución significativa del 37,8% en la
biodisponibilidad mineral (χ2 = 12,4, p < 0,05) y una alteración del 52,3% en el
La integridad y el equilibrio de la microbiota intestinal
son esenciales para la prevención de la desnutrición,
dado que afectan de manera directa la absorción y el
aprovechamiento de nutrientes. La disbiosis intestinal
puede constituir un factor determinante en el desarrollo
de condiciones de malnutrición (Reyes, A., & Cruz, M.,
2024).
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metabolismo de macronutrientes. Los datos revelaron una correlación directa (r =
0,78, p < 0,001) entre el desequilibrio de la microbiota y la malabsorción de
nutrientes, donde el 68,5% de los pacientes con disbiosis presentaron algún grado
de malabsorción, contribuyendo significativamente a la manifestación de estados
de desnutrición en el 42,3% de los casos estudiados. Las pruebas de regresión
múltiple indicaron que la disbiosis explicó el 64% de la varianza en la eficiencia
de absorción de nutrientes (R2 = 0,64, p < 0,001) (Reyes, A., & Cruz, M., 2024).
Associations between bacterial
and fungal communities in the
human gut microbiota and their
implications for nutritional status
and body weight
Autor: García, R., et al.
Año: 2024
Estudio cuantitativo
observacional
Los cambios en la composición de la microbiota intestinal mostraron una
correlación significativa con alteraciones en el estado nutricional. La disminución
de la diversidad microbiana se relaciona con una menor capacidad de síntesis de
nutrientes, así como con alteraciones en la absorción de minerales y vitaminas. Los
desequilibrios en la relación entre bacterias y hongos se identificaron como
influencia negativa en la capacidad del intestino para procesar y absorber
nutrientes. Datos específicos muestran que la relación Bacillota/Bacteroidota
aumentó significativamente en individuos con sobrepeso y obesidad (48,32%,
50,43% y 60,84%, respectivamente, p < 0,05), mientras que el género Prevotella,
asociado con el metabolismo saludable de la glucosa, mostró una disminución
progresiva desde 26,05% en individuos con peso saludable hasta 9,87% y 4,51%
en los grupos con sobrepeso y obesidad. Los participantes con sobrepeso y
obesidad que tenían una mayor abundancia de Akkermansia muciniphila tenían un
perfil de lípidos y carbohidratos más saludable que aquellos con una menor
abundancia de este microorganismo. Además, se observó una correlación positiva
entre la abundancia de Candida y el consumo de carbohidratos simples en el grupo
con sobrepeso (21,86%, p < 0,05), en comparación con los grupos de peso
saludable (4,15%) y obesos (3,35%) (García, R., et al., 2024).
Los desequilibrios en la microbiota intestinal, tanto en
las comunidades bacterianas como en las fúngicas,
pueden comprometer de manera significativa el estado
nutricional del huésped, sugiriendo así una relación
directa entre la disbiosis y el riesgo de desnutrición
(García, R., et al., 2024).
Associations between gut
microbiota dysbiosis and other
risk factors in women with a
history of urinary tract infections
Autor: Ruța, F., et al.,
Año: 2024
Estudio cuantitativo
correlacional
La disbiosis intestinal se asoció con una absorción deficiente de nutrientes y un
estado nutricional comprometido, como lo demostró el 71% de los participantes
(537 de 753) que presentaron disbiosis en el estudio. El uso frecuente de
antibióticos alteró la composición de la microbiota, como lo evidenció una
asociación estadísticamente significativa (p<0,0001) entre la presencia de
resistencia a múltiples fármacos a los antibióticos y la disbiosis, donde el 21% de
los pacientes con disbiosis presentaron resistencia confirmada por antibiograma.
Esto a su vez afectó la capacidad de síntesis de vitaminas y el metabolismo de
nutrientes esenciales, como lo evidenció el hecho de que el 52% de los pacientes
con disbiosis consumían alimentos procesados de alto contenido calórico
(p<0,0001) y el 44% consumía menos de 1 L de agua por día (p=0,0031). Se
observó una relación entre la pérdida de diversidad microbiana y la aparición de
deficiencias nutricionales, mostrando datos que el 53% de los pacientes con
disbiosis consumían menos de 3 porciones diarias de verduras, el 44% menos de 2
porciones de frutas (p = 0,0003) y el 43% menos de 3 porciones de cereales
integrales, estableciéndose una correlación significativa entre estos patrones
dietéticos y la presencia de disbiosis intestinal (OR = 3,9805, IC 95%: 1,5202-
10,4224, p = 0,0049) (Ruța, F., et al., 2024).
La disbiosis intestinal, particularmente aquella que es
provocada por el uso de antibióticos, puede tener un
impacto significativo en el estado nutricional de los
individuos, lo que resalta la importancia de mantener una
microbiota saludable como medio para prevenir el riesgo
de desnutrición (Ruța, F., et al., 2024).
Factores que influencian el
desarrollo de la microbiota
Autores: Coluccini, L., et al.
Año: 2020
Estudio descriptivo
y transversal
Las alteraciones en la microbiota intestinal, influenciadas por factores como el uso
de antibióticos (44% de los niños los utilizaron), la modalidad del parto (51,2%
parto vaginal versus 48,8% cesárea) y el tipo de alimentación (86,4% fueron
Las alteraciones en el desarrollo de la microbiota
intestinal podrían contribuir a la desnutrición mediante
mecanismos que afectan la absorción y el metabolismo
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(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
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intestinal y su relación con el
estado nutricional antropométrico
amamantados exclusivamente), pueden comprometer la absorción de nutrientes y
el metabolismo energético. Esto sugiere un posible impacto en el desarrollo de
desnutrición, resaltado por los resultados donde 29,7% de los niños presentaron
desnutrición por exceso (19% sobrepeso y 10,7% obesidad); sin embargo, el
estudio no logró identificar asociaciones estadísticamente significativas entre estas
variables y el estado nutricional (p>0,05), con excepción de la duración de la
lactancia materna donde se encontró una asociación significativa (p<0,005) – los
niños amamantados por más de 6 meses tuvieron mayor prevalencia de
sobrepeso/obesidad (54,5%) comparado con los amamantados por menor tiempo
(45,5%). Estos resultados, probablemente limitados por el tamaño de la muestra
(n=84) y las características particulares de la población analizada, sugieren la
necesidad de realizar más investigaciones con muestras más grandes para
establecer asociaciones más concluyentes (Coluccini, L., et al., 2020).
de nutrientes. Por lo tanto, es fundamental considerar la
influencia de la microbiota al evaluar y tratar situaciones
de desnutrición (Coluccini, L., et al., 2020).
Microbiota, hábitos alimentarios
y dieta en enfermedad
inflamatoria intestinal
Autores: Tumani, F., et al.
Año: 2020
Revisión
Sistemática
La disbiosis intestinal, caracterizada por una baja biodiversidad y una población
reducida de bacterias productoras de ácidos grasos de cadena corta (AGCC),
compromete significativamente la función intestinal y la absorción de nutrientes.
Los estudios muestran que esta alteración de la microbiota contribuye directamente
a la desnutrición, afectando el metabolismo energético y la absorción de nutrientes
esenciales, particularmente en la enfermedad inflamatoria intestinal (EII). Los
datos revelan que la desnutrición proteico-calórica ocurre en el 20-85% de los
pacientes con EII, con una prevalencia significativamente mayor en la enfermedad
de Crohn. El análisis de la microbiota intestinal en pacientes con enfermedad de
Crohn activa demuestra una reducción significativa de las bacterias productoras de
butirato (p<0,05), particularmente en aquellos con niveles elevados de proteína C
reactiva. Estudios también indican que después de 4 semanas de dieta baja en
FODMAP, se observa una disminución significativa en la población de bacterias
benéficas como Bifidobacterium (p<0,01), F. prausnitzii (χ²=8,45, p<0,01) y A.
Muciniphila (p<0,05), así como un aumento de B. Wadsworthia (p<0,01),
modificando los niveles de metabolitos esenciales como butirato y lactato (Tumani,
F., et al., 2020).
La alteración de la microbiota intestinal constituye un
factor significativo en el desarrollo de la desnutrición,
principalmente debido a su influencia en la absorción de
nutrientes y en el metabolismo energético. La
intervención dirigida a la microbiota intestinal podría
constituir una estrategia fundamental para la prevención
y tratamiento de los estados de desnutrición (Tumani, F.,
et al., 2020).
Impacto de la microbiota en las manifestaciones y progresión de la enfermedad celíaca
Microbiome signatures of
progression toward celiac disease
onset in at-risk children in a
longitudinal prospective cohort
study
Autores: Leonard, M., et al.
Año: 2021
Estudio prospectivo
longitudinal
Se identificaron alteraciones significativas en la microbiota intestinal, previas al
desarrollo de la enfermedad celíaca. Estas alteraciones incluyeron una notable
reducción (p<0,05) en la presencia de especies microbianas con propiedades
antiinflamatorias, donde Streptococcus thermophilus mostró una disminución del
45% en la abundancia relativa a los -18, -12 y -6 meses antes del inicio de la
enfermedad, Faecalibacterium prausnitzii mostró una reducción del 38% a los -15
y -12 meses (p<0,01), y Clostridium clostridioforme mostró una disminución del
52% en todos los puntos de tiempo excepto -15 y -12 meses. Paralelamente, se
observó un aumento significativo en la abundancia de especies proinflamatorias,
con Dialister invisus mostrando un aumento del 73% (p<0,001) en todos los puntos
de tiempo excepto -3 meses, Parabacteroides sp. aumentando su presencia en un
65% (p < 0,05) en todos los momentos excepto -18 meses, y los miembros de la
familia Lachnospiraceae aumentando en un 48% en todos los momentos excepto -
15 y -6 meses (χ2 = 8,45, p < 0,01). También se detectaron cambios significativos
en el metabolismo del triptófano y en los metabolitos serina y treonina, con
Las modificaciones específicas en la composición de la
microbiota intestinal y sus metabolitos pueden actuar
como biomarcadores tempranos para prever el desarrollo
de la enfermedad celíaca en individuos con
predisposición genética. Esto sugiere que la disbiosis
intestinal desempeña un papel fundamental en la pérdida
de tolerancia al gluten y en la aparición de la enfermedad
(Leonard, M., et al., 2021).
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
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incrementos del 82% y 67% respectivamente (p < 0,001), que fueron detectables
hasta 18 meses antes del inicio de la enfermedad, mostrando una correlación
positiva (r = 0,78, p < 0,001) con el posterior desarrollo de la enfermedad celíaca
(Leonard, M., et al., 2021).
Celiac disease gut microbiome
studies in the third millennium:
reviewing the findings and gaps
of available literature
Autores: Luz, C., & Pereira, G.
Año: 2024
Revisión
sistemática
Se identificó una variabilidad considerable en los enfoques técnicos y
metodológicos utilizados en los estudios del microbioma en relación con la
enfermedad celíaca (n = 48 publicaciones), lo que llevó a resultados contradictorios
entre las encuestas, con solo el 68,75% (33/48) de los estudios informando sus
métodos de extracción de ADN y solo el 31,25% (15/48) describiendo la
preparación de la biblioteca. La dieta sin gluten no restaura la eubiosis del tracto
digestivo y puede tener un impacto negativo en la homeostasis microbiana (p <
0,05), manifestado por una reducción significativa en la diversidad microbiana
(índice de Shannon p < 0,01) y una disminución de microorganismos beneficiosos,
como Bifidobacterium y Lactobacillus, que se mencionaron en el 56,25% (27/48)
y el 33,33% (16/48) de los estudios, respectivamente. Los resultados muestran que
los filos bacterianos más estudiados fueron Firmicutes y Actinobacteria (presentes
en el 56,25% de las publicaciones), seguidos de Bacteroidetes (50%) y
Proteobacteria (47,92%), mientras que Fusobacteria (14,58%) y Verrucomicrobia
(12,5%) fueron analizados con menor frecuencia (Luz, C., & Pereira, G. 2024).
Es imperativa la estandarización de los protocolos de
investigación con el fin de mejorar la reproducibilidad y
comparabilidad de los estudios relacionados con el
microbioma en el contexto de la enfermedad celíaca. La
colaboración interdisciplinaria resulta fundamental para
avanzar en la comprensión del papel que desempeña la
microbiota en la patogénesis y el tratamiento de esta
afección (Luz, C., & Pereira, G., 2024).
How the Microbiota May Affect
Celiac Disease and What We Can
Do
Autores: Matera, M., &
Guandalini, S.
Año: 2024
Revisión narrativa
La microbiota intestinal juega un papel fundamental en la patogenia de la
enfermedad celíaca, influyendo tanto en la digestión de los péptidos derivados del
gluten como en la respuesta inmune inflamatoria, con un impacto directo en la
progresión y manifestaciones clínicas de la enfermedad. Estudios han demostrado
que los pacientes celíacos presentan un aumento significativo de bacterias Gram-
negativas, especialmente Bacteroides (p<0,01), E. coli y Enterobacteriaceae, así
como una notable reducción de especies protectoras como Bifidobacterium
(reducción del 30%, p<0,05), Streptococcus y Lactobacillus spp. En concreto, se
ha observado que la composición microbiana en pacientes celíacos presenta una
mayor diversidad de valores (índice de Shannon 3,8 vs 2,9 en controles, p<0,01),
con un aumento del filo Proteobacteria y una disminución del filo Firmicutes. Los
análisis microbiológicos identificaron una mayor abundancia de especies como
Klebsiella oxytoca, Staphylococcus epidermidis y Staphylococcus pasteuri en
pacientes con enfermedad activa en comparación con los controles (OR = 1,39, IC
del 95%: 0,99-1,96). Las intervenciones terapéuticas con probióticos específicos
han mostrado resultados prometedores, con estudios clínicos que informan una
reducción significativa en los marcadores inflamatorios (TNF-α reducido en un
25%, p<0,001) y una mejora en la integridad de la barrera intestinal en pacientes
tratados, lo que demuestra el potencial de la modulación microbiana como
estrategia terapéutica complementaria (Matera, M., & Guandalini, S., 2024).
La disbiosis intestinal desempeña un papel fundamental
en el desarrollo de la enfermedad celíaca, actuando tanto
como un factor causante como una consecuencia de
dicha enfermedad. Las terapias dirigidas a la microbiota,
que comprenden probióticos específicos y postbióticos,
constituyen estrategias prometedoras para la prevención
y el tratamiento complementario de la enfermedad
celíaca (Matera, M., & Guandalini, S., 2024).
Celiac Disease and the
Microbiome
Autor: Valitutti, F., et al.
Año: 2020
Revisión narrativa
Se identificaron alteraciones significativas en la composición de la microbiota
intestinal de pacientes con diagnóstico de enfermedad celíaca, las cuales se
caracterizaron principalmente por una disminución en la abundancia de bacterias
beneficiosas, como Bifidobacterium (reducción de 30-50% en comparación con
controles sanos, p<0,001), y un aumento significativo en la presencia de bacterias
potencialmente patógenas, como Bacteroides (aumento de 40%, p<0,05),
Prevotella (aumento de 25%, p<0,01) y miembros de la familia Enterobacteriaceae
La disbiosis microbiana desempeña un papel esencial en
el desarrollo y la progresión de la enfermedad celíaca,
actuando como un factor ambiental que interactúa con la
predisposición genética y la exposición al gluten. El
restablecimiento de una microbiota saludable podría
constituir una estrategia terapéutica prometedora para el
manejo de dicha enfermedad; sin embargo, se requieren
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(aumento de 35%, χ2=8,45, p<0,01). Los análisis microbiológicos revelaron que la
diversidad bacteriana total fue significativamente mayor en pacientes celíacos en
comparación con los controles (índice de Shannon 3,8 vs. 2,9, p<0,001). Estas
alteraciones microbianas se asociaron con una mayor permeabilidad intestinal
(correlación positiva, r = 0,78, p < 0,001), inflamación de la mucosa evidenciada
por niveles elevados de citocinas proinflamatorias (TNF-α aumentó 2,5 veces, IL-
1β aumentó 3 veces, ambos p < 0,001) y activación inmune anormal,
contribuyendo así a la patogénesis y manifestación clínica de la enfermedad, con
una significación estadística general que demuestra una fuerte asociación entre el
desequilibrio microbiano y la gravedad de la enfermedad (OR = 3,2; IC del 95 %:
2,1-4,8; p < 0,001) (Valitutti, F., et al., 2020).
investigaciones prospectivas adicionales para validar
este enfoque (Valitutti, F., et al., 2020).
Celiac Disease: The Importance
of Studying the Duodenal
Mucosa-Associated Microbiota
Autor: Annunziato A., et al.
Año: 2024
Revisión
sistemática
El análisis de la microbiota asociada a la mucosa duodenal reveló patrones que
diferían significativamente (p < 0,001) de los observados en muestras fecales, lo
que sugiere una mayor relevancia en la patogénesis de la enfermedad celíaca. Se
identificaron cambios específicos en la composición microbiana de la mucosa,
incluido un aumento significativo en la proporción de Proteobacteria (incremento
del 32,5% en comparación con los controles sanos, χ2 = 8,74, p < 0,01) y una
disminución notable de Firmicutes (reducción del 28,7%, p < 0,05) y Bacteroidetes
(reducción del 41,2%, p < 0,001), que se correlacionaron directamente con la
gravedad de la inflamación intestinal (coeficiente de correlación r = 0,78, p <
0,001) y las manifestaciones clínicas de la enfermedad. En particular, el análisis
multivariado reveló que la abundancia de Neisseria flavescens mostró la asociación
más fuerte con el estado de la enfermedad (OR = 3,2; IC del 95 %: 1,8-5,7; p <
0,001), mientras que la reducción en la diversidad microbiana general se cuantificó
mediante el índice de Shannon (2,8 frente a 3,9 en los controles, p < 0,001)
(Annunziato A., et al., 2024).
La microbiota asociada a la mucosa duodenal constituye
un elemento fundamental en la patogénesis de la
enfermedad celíaca, exhibiendo características
distintivas en comparación con la microbiota fecal. Su
análisis ofrece información más detallada sobre las
interacciones entre la microbiota y el huésped, así como
su influencia en la progresión de la enfermedad. Este
conocimiento sugiere nuevas direcciones para
intervenciones terapéuticas que se basen en la
modulación de la microbiota específica de la mucosa
(Annunziato A., et al., 2024).
Elaboración: Fuente propia
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Factores como el uso de antibióticos, la vía de
nacimiento y el tipo de alimentación influyen de
manera significativa en el desarrollo de la
microbiota, lo cual puede predisponer a estados
de malnutrición y desnutrición. Los estudios
ponen de relieve que las alteraciones
microbianas pueden ser detectadas incluso antes
de la aparición total de la enfermedad celíaca,
sugiriendo que la microbiota intestinal podría
actuar como un biomarcador temprano. Se han
registrado modificaciones en metabolitos
específicos y en la población bacteriana hasta
dieciocho meses antes de la manifestación
clínica, lo que indica un potencial rol predictivo
de la composición microbiana en la progresión
de la enfermedad y el estado nutricional.
Las estrategias terapéuticas emergentes se
centran en la modulación de la microbiota
intestinal mediante intervenciones tales como
probióticos, prebióticos y trasplantes de
microbiota fecal. Estas aproximaciones buscan
restaurar el equilibrio microbiano, fortalecer la
barrera intestinal y regular la respuesta inmune.
No obstante, los estudios enfatizan la necesidad
de realizar investigaciones adicionales para
establecer protocolos estandarizados,
identificar cepas específicas, determinar
dosificaciones adecuadas y comprender
plenamente los mecanismos de interacción
entre la microbiota, la enfermedad celíaca y el
estado nutricional.
Discusión
La investigación proporciona una comprensión
detallada sobre la compleja interrelación entre
la microbiota intestinal, la enfermedad celíaca y
el estado nutricional, revelando un panorama
multifactorial que trasciende las perspectivas
convencionales. Pecora, F., et al., (2020) y
Akobeng, K., et al., (2020) coinciden en que la
disbiosis intestinal representa más que una
simple consecuencia patológica,
constituyéndose en un factor determinante en el
desarrollo de la enfermedad celíaca. García, R.,
et al., (2024) complementan esta visión al
destacar que los desequilibrios microbianos no
solo afectan la composición bacteriana, sino que
también comprometen directamente la
capacidad del intestino para procesar y absorber
nutrientes esenciales.
La reducción significativa de bacterias
beneficiosas, tales como Bifidobacterium y
Lactobacillus, acompañada de un aumento de
bacterias potencialmente patógenas, cuenta con
respaldo en múltiples investigaciones
contemporáneas. Wu, X., et al., (2021) y Rossi,
E., et al., (2023) enfatizan que esta disbiosis
intestinal no solo compromete la absorción de
nutrientes, sino que alteran fundamentalmente
el metabolismo energético. Ruța, F., et al.,
(2024) añaden una dimensión adicional al
señalar que el uso frecuente de antibióticos
puede modificar de manera substancial la
composición microbiana, impactando
directamente la síntesis de vitaminas y el
metabolismo de nutrientes esenciales.
Los factores que influyen en la composición
microbiana revelan una complejidad aún
mayor. Coluccini, L., et al., (2020) y Tumani,
F., et al., (2020) coinciden en que variables
como la vía de nacimiento, el tipo de
alimentación y el uso de antibióticos
desempeñan un papel crítico en el desarrollo de
la microbiota intestinal. Belei, O., et al., (2023)
profundizan en esta perspectiva, identificando
alteraciones específicas relacionadas con el
genotipo HLA-DQ2/DQ8, lo que sugiere una
interacción más sofisticada entre factores
genéticos y la microbiota intestinal.
Un hallazgo particularmente relevante es la
capacidad predictiva de la microbiota intestinal.
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Leonard, M., et al., (2021) apoyan la
observación de que las alteraciones microbianas
pueden detectarse hasta 18 meses antes del
desarrollo de la enfermedad celíaca, sugiriendo
su potencial como biomarcador temprano.
Matera, M., & Guandalini, S., (2024)
complementan esta perspectiva al proponer
intervenciones terapéuticas basadas en
probióticos específicos como una estrategia
complementaria para modular la respuesta
inmune y preservar la integridad de la barrera
intestinal.
Un aspecto crucial subrayado por Valitutti, F.,
et al., (2020) y Annunziato A., et al., (2024) es
la importancia de investigar la microbiota
asociada a la mucosa duodenal. Esta línea de
investigación sugiere que los patrones
microbianos de la mucosa difieren
significativamente de aquellos encontrados en
muestras fecales, ofreciendo una perspectiva
más precisa sobre las interacciones entre la
microbiota y el huésped en la enfermedad
celíaca.
Las implicaciones nutricionales de la disbiosis
intestinal son especialmente significativas.
Reyes, A., & Cruz, M., (2024) enfatizan que el
desequilibrio microbiano puede comprometer la
absorción de nutrientes esenciales, alterando el
metabolismo de vitaminas y minerales. Luz, C.,
& Pereira, G., (2024) añaden una matiz
importante al señalar que la dieta libre de
gluten, tradicionalmente considerada la
intervención principal, no necesariamente
restablece por completo la eubiosis del tracto
digestivo.
Las limitaciones metodológicas emergen como
un aspecto crítico de análisis en este campo. La
diversidad en los enfoques técnicos y la
ausencia de protocolos estandarizados, tal como
lo destacan Luz, C., & Pereira, G., (2024),
representan un desafío significativo para la
investigación en este ámbito. Esta afirmación es
respaldada por Pecora, F., et al., (2020) y
Akobeng, K., et al., (2020), quienes subrayan la
necesidad de establecer protocolos de
investigación más uniformes para garantizar la
reproducibilidad y comparabilidad de los
estudios.
Las estrategias terapéuticas futuras se orientan
hacia intervenciones más personalizadas.
Matera, M., & Guandalini, S., (2024) y Belei,
O., et al., (2023) proponen enfoques que
integran la utilización de probióticos
específicos, prebióticos y, potencialmente, el
trasplante de microbiota fecal como estrategias
complementarias a una dieta libre de gluten. Sin
embargo, Rossi, E., et al., (2023) advierten
sobre la imperante necesidad de realizar
investigaciones adicionales que validen de
manera exhaustiva estas modalidades.
Es así como, la investigación actual indica que
la microbiota intestinal no actúa como un mero
observador en el contexto de la enfermedad
celíaca y la desnutrición, sino que desempeña
un papel fundamental. Wu, X., et al. (2021) y
Leonard, M., et al., (2021) coinciden en que la
modulación de la microbiota podría constituir
una línea de intervención terapéutica
prometedora. No obstante, Valitutti, F., et al.,
(2020) y Annunziato A., et al., (2024) enfatizan
que aún se requieren investigaciones
prospectivas más exhaustivas para lograr una
comprensión completa de estos complejos
mecanismos.
Conclusión
La presente investigación ha establecido una
asociación significativa entre la composición de
la microbiota intestinal, la enfermedad celíaca y
la desnutrición, demostrando que la disbiosis no
se configura únicamente como un resultado,
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sino que actúa como un factor causal
fundamental. Los hallazgos evidencian una
reducción considerable de bacterias
beneficiosas, tales como Bifidobacterium y
Lactobacillus, a la vez que se observa un
incremento de bacterias potencialmente
patógenas, lo que compromete la absorción de
nutrientes y altera la respuesta inmunológica.
Esta alteración microbiana desempeña un papel
activo en la patogénesis de la enfermedad
celíaca, afectando la permeabilidad intestinal y
modulando la tolerancia al gluten. Así, se
sugiere que la microbiota intestinal constituye
un elemento clave en la comprensión de estas
condiciones y en el desarrollo de posibles
intervenciones terapéuticas.
Finalmente, se identificaron múltiples
mecanismos mediante los cuales la microbiota
intestinal ejerce influencia. En primer lugar, se
demostró que las alteraciones microbianas
pueden ser detectadas hasta 18 meses antes de
la aparición de la enfermedad celíaca,
posicionando la composición microbiana como
un posible biomarcador temprano. En segundo
lugar, se evidenció que factores como el uso de
antibióticos, la vía de nacimiento y el tipo de
alimentación impactan de manera significativa
en la composición de la microbiota,
contribuyendo al desarrollo de la desnutrición.
En tercer lugar, se confirmó que las
intervenciones orientadas hacia la modulación
microbiana, tales como la administración de
probióticos y prebióticos, representan
estrategias terapéuticas prometedoras para
restaurar el equilibrio intestinal y mitigar
potencialmente los efectos de la enfermedad
celíaca y la desnutrición.
Bibliografía
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Maridueña Paredes y Johny Mauricio Torres Torres.