Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 3 No. 10
Octubre del 2022
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ORGANIZACIÓN Y DISTRIBUCIÓN DEL ENTRENAMIENTO DE LA NATACIÓN EN
EDADES TEMPRANAS.
ORGANIZATION AND DISTRIBUTION OF SWIMMING TRAINING AT EARLY AGES.
Autor: Michael William Hernández Barcaz.
ORCID ID: https://orcid.org/0000-0001-7307-7840
E-mail de contacto: mhdezbarcaz@gmail.com
Articulo recibido: 3 de Febrero del 2022
Articulo revisado: 21 de Abril del 2022
Articulo aprobado: 30 de Octubre del 2022
Licenciado en cultura física egresado de la Universidad de Ciencias de la Cultura Física de Granma (Cuba). Posee una Maestría en
Ciencias de la Cultura Física y el Deporte en la Universidad de Granma (Cuba). Profesor Asistente. Entrenador de Natación en Granma
(Cuba).
Resumen
El desarrollo del entrenamiento de los niños y
jóvenes nadadores debe estar en correlación
con las edades de máximo rendimiento del
deporte, de tal forma que el aumento
progresivo en el rendimiento lo lleve a que
alcance sus máximos resultados a la edad
óptima que corresponda a cada deporte. El
desarrollo del entrenamiento de los niños y
jóvenes nadadores debe estar en correlación
con las edades de máximo rendimiento del
deporte. Los primeros años debemos construir
una base sólida, en la que se puedan apoyar en
el futuro. La misma debe ser fundamentalmente
con el desarrollo de la capacidad aeróbica, a
través del trabajo de volumen y ritmo. La
velocidad se debe mejorar a través de un buena
técnica y ritmos parejos, por lo que es
contraproducente el abuso con las distancias y
tiempos de entrenamiento que se les debe
dedicar en las edades tempranas.
Palabras clave: Organización, Distribución,
Entrenamiento, Natación.
Abstract
The development of the training of children and
young swimmers must be in correlation with
the ages of maximum performance of the sport,
in such a way that the progressive increase in
performance leads it to reach its maximum
results at the optimal age that corresponds to
each sport. The development of the training of
children and young swimmers must be in
correlation with the ages of maximum
performance of the sport. The first years we
must build a solid base, on which they can lean
in the future. The same must be fundamentally
with the development of aerobic capacity,
through volume and rhythm work. Speed must
be improved through good technique and even
rhythms, so abuse with distances and training
times that should be dedicated to them at an
early age is counterproductive.
Keywords: Organization, Distribution,
Training, Swimming.
Sumário
O desenvolvimento do treino de crianças e
jovens nadadores deve estar em correlação com
as idades de rendimento máximo da
modalidade, de tal forma que o aumento
progressivo do rendimento o leve a atingir os
seus resultados máximos na idade óptima que
corresponde a cada modalidade. O
desenvolvimento do treino de crianças e jovens
nadadores deve estar em correlação com as
idades de máximo rendimento da modalidade.
Nos primeiros anos, devemos construir uma
base sólida, na qual eles possam se apoiar no
futuro. O mesmo deve ser fundamentalmente
com o desenvolvimento da capacidade
aeróbica, através do trabalho de volume e ritmo.
A velocidade deve ser melhorada através de boa
técnica e até ritmos, por isso abusar com
distâncias e tempos de treino que devem ser
dedicados a eles desde cedo é contraproducente.
Palavras-chave: Organização, Distribuição,
Treinamento, Natação.
Introducción
En la natación poco a poco han ido subiendo las
edades promedio de los finalistas Olímpicos, en
la actualidad esto permite establecer que la edad
del máximo rendimiento en varones está por
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encima de los veinte años, siendo más alta para
los velocistas que para los fondistas. Las
mujeres llegan un poco antes, debido a que su
desarrollo es anterior al de los varones. Según
la literatura científica especializada en el tema,
una buena edad para el inicio dentro de la
natación es alrededor de los 8 años. Dando un
margen a los entrenadores de trabajo de más de
diez años para desarrollar las habilidades
requeridas en los jóvenes atletas. Por lo que no
se debe apresurar los procesos.
En los primeros años se debe construir una base
sólida, en la que se puedan apoyar en el futuro.
La misma debe ser fundamentalmente con el
desarrollo de la capacidad aeróbica, a través del
trabajo de volumen y ritmo. Siendo
indispensable el desarrollo de la capacidad
aeróbica a través del mejoramiento de todas sus
variables, lo cual permitirá desarrollar en el
futuro los entrenamientos de mayor intensidad
y utilizar los entrenamientos de volumen en los
nadadores jóvenes, a los efectos de construir la
base que le permita realizar en su etapa
específica los entrenamientos de mayor
intensidad (Berrio-López, A., et all. 2020).
Muchos entrenadores de nivel mundial creen en
los entrenamientos de larga distancia, y están
convencidos que los nadadores entrenados en
largas distancias en las edades tempranas están
en condiciones de competir en todas las
pruebas. Según Villordo, D. (2022). entre más
grande es la base de la pirámide construida a
través de todos los años de entrenamiento en
atletas jóvenes de Natación, mayor será la altura
alcanzada en los resultados.
Según Osmond, G. (2022), hasta cierto punto
los velocistas más avezados pueden
concentrarse más en las distancias cortas, pero,
en general se observa que aún ellos deben
entrenarse en los 400 y 1500 metros, y que
mientras son jóvenes todos los nadadores deben
entrenarse como si lo hicieran para
competencias de 400 y 1500. Aquellos que
tuvieran aptitudes especiales se harán velocistas
a su debido tiempo, pero, por medio de un
temprano entrenamiento a distancia, habrán
desarrollado corazón y pulmones resistentes.
Ejemplo de ello es que prácticamente todos los
velocistas campeones de estilo libre de
Australia han comenzado como nadadores de
400 y 1500 metros. Roulière, C. (2022). Estudia
como ejemplo a Jan Henricks (ganador
Olímpico de 100 metros en 1956) hasta la edad
de 15 años fue nadador de 1500 metros y que en
1953 ganó el campeonato australiano de esa
distancia".
Otro nadador australiano ganador olímpico fue
Ian Thorpe, era nadador de distancias largas
hasta que llego a su máximo exponente de los
juegos olímpicos donde nado los 200 y 400
metros dominando estas distancias con facilidad
(Roulière, C. 2022).
En época actual un ejemplo de esto son las
declaraciones de David Popovici. El ostenta el
récord mundial de 100 metros libre. Se puede
definir como un velocista nato. Sin embargo, él
comenta:
“yo nado 5.000 metros y un poco más, en
mi trabajo principal como entrenamiento
de larga distancia. Algunos días realizo
una entrada en calor, luego un ejercicio
principal de cinco kilómetros. Después de
ello una o dos series de 25 metros, o
sprints más cortos, luego una vuelta a la
calma y eso es todo. Generalmente
entreno 11 a 13 sesiones semanales.
Cuando necesito entrenar más duro,
realizo tres sesiones semanales.
Usualmente promedio unos 60 kilómetros
Semanales. Cuando voy acercándome a
la competencia, comienzo compitiendo
primero en 400 y 200, para luego pasar a
los 100 metros. De esta forma me es
mucho más fácil” (Sports, C. 2022).
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En este medio todos los grandes nadadores de
100 y 200 metros de esta época fueron aquellos
que trabajaron mucho volumen en su etapa
formativa. Si se observa detenidamente los
finalistas de los Campeonatos del mundo de los
últimos diez años, el 85 al 90% fueron ocupados
por los nadadores cuyos entrenadores trabajan
volúmenes importantes en las edades
formativas, con programas orientados hacia la
creación de una base aeróbica importante.
Sin ir más lejos, fue Michael Phelps en los
juegos de Beijíng con sus 8 medallas de oro el
más alto exponente de este tipo de
entrenamiento desde edades tempranas. Las
competencias de natación fueron históricas en
Beijing en parte gracias a la gran cantidad de
marcas mundiales y olímpicas que fueron
batidas: 21 récords mundiales y 30 récords
olímpicos. Inclusive varios competidores que
no ganaron oro, rompieron récord (Da Silva, J.
et all. 2020).
Desarrollo
Las brazadas generalmente, se interpreta en
cómo estirar más el brazo en el agua hacia
delante y empujar hacia atrás. La experiencia
del autor demuestra que al mantener un buen
equilibrio en el agua y de saber deslizarse por
ella permite disminuir las brazadas. La longitud
de la brazada tiene que ver con la distancia que
recorre el cuerpo cada vez que se da una
brazada.
Para entender mejor este cambio en el pensar y
sentir la natación, es importante reconsiderar el
elemento en lo cual la misma se desarrolla.
Hablar del agua es hablar de una sustancia 1000
veces más densa que el aire; es hablar también
de una sustancia elástica. En cierta forma, la
natación se desarrolló olvidando las leyes de la
naturaleza. Produjo un relativo complejo
proceso de perfeccionamiento de brazada donde
el ejercicio consiste en empujar más, mientras
se vuelve imposible sobrepasar la resistencia y
la fuerza del agua contra el cuerpo.
En otras palabras, parece ser que mientras más
duro se empuja contra el agua para avanzar, más
el agua resiste y frena al cuerpo, y más se debe
aumentar la fuerza contra el agua para ganar en
tiempo. El resultado es un desgaste de energía
donde lo que se gana se calcula en pérdida
considerable de energía, en lugar de energía
para mejorar la velocidad con la cual se
desplazan los peces dentro del agua, con la
menor utilización de energía posible, lo que
permite reflexionar la natación desde otros
criterios. Actualmente, la aplicación de la
técnica basada en la economía del esfuerzo se
ha vuelto una prioridad en los equipos
competitivos (Hilares Quispe, J. 2022).
Fundamentos fisiológicos del entrenamiento
de larga duración.
Con los trabajos de largas distancias a moderada
velocidad se puede mejorar la ingesta,
transporte y utilización del oxígeno, también
mejorara el volumen inspiratorio, la velocidad
de intercambio gaseoso, el acondicionamiento
del músculo cardíaco, con un aumento
importante en el volumen sistólico, y menor
volumen residual, aumento del nivel de
hemoglobina, aumento en número y tamaño de
los capilares, aumento en número y tamaño de
las mitocondrias, aumento de la actividad
enzimática aeróbica (Lozada Tobar, K. 2022).
Investigaciones realizadas han demostrado que
el entrenamiento controlado de larga distancia a
velocidad moderada por largo tiempo es la
mejor forma de lograr ese acondicionamiento.
Por otro lado, el entrenamiento de muy alta
velocidad, es demasiado intenso para que nos
permita realizar el trabajo suficiente para lograr
desarrollar la capacidad aeróbica (Lozada
Tobar, K. 2022).
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Esto no quiere decir que el entrenamiento de
resistencia aeróbica no contribuye a la fuerza y
potencia muscular. Pero el proceso es mucho
más lento y está marcado por un gradual
incremento en la intensidad del trabajo.
Beneficios técnicos del entrenamiento de larga
duración.
El público no especializado no conoce el
proceso completo de altos y bajos por los que
pasa un gran atleta para alcanzar el éxito.
Cuando se rompe un récord o se sube al podio
en una competencia importante, nadie puede
adivinar la serie de fracasos que ocurren en el
día a día durante el entrenamiento. El proceso
es largo y muy difícil para todos. El éxito es
lograr resultados predecibles en un ambiente
totalmente impredecible.
Antes que pensar en entrenar es necesario lograr
una buena técnica. Por lo tanto, los niños deben
comenzar a entrenar largas distancias cuando
logran una buena base técnica de su estilo.
Cuando el niño no tiene automatizada una
técnica correcta, se debe tener en cuenta que las
constantes repeticiones realizadas a baja
velocidad son ideales para construir los
correctos patrones técnicos. Mientras que las
cortas distancias ejecutadas a máxima velocidad
provocan deterioros en la técnica.
A altas velocidades es muy difícil detectar
correctamente los errores, pero a bajas
velocidades estos errores se ven magnificados y
son mucho más fáciles de detectar, por lo tanto,
de corregir. Por último, no se debe olvidar que
los niños no tienen suficiente potencia muscular
para desarrollar correctamente altas
velocidades, por eso es más adecuado el trabajo
de largas distancias a velocidades moderadas.
Errores que muchas veces se cometen en el
entrenamiento de los niños A pesar de todo lo
anteriormente mencionado, de los beneficios de
crear una buena base de trabajo a edades
tempranas, en nuestro país, sin embargo, se
plantean una serie de problemas en esas edades,
sobre todo en la orientación que se les dan a
algunos planes de entrenamiento.
Las edades más difíciles, son las que preceden a
la pubertad muchas veces el desarrollo precoz,
estatura elevada para la edad y musculatura
superior a la media de la edad cronológica
permite que el joven atleta que por esas
características desarrolla una velocidad superior
al resto en distancias cortas. Muchos
entrenadores cometen el gravísimo error de
trabajar duramente la zona láctica en esa edad,
olvidándose del entrenamiento aeróbico. Los
cuales lograran grandes resultados en un lapso
muy corto de tiempo, marcas sorprendentes en
50 y 100 metros, pero generalmente existe un
gran desequilibrio en las marcas de 400, 800 y
1500, índice elocuente de que su trabajo de base
es muy pobre.
En estos casos son nadadores juveniles que
encuentran su estancamiento y no pueden
progresar más, porque no tienen base para
soportar entrenamientos más duros, lo que los
hace alejar rápidamente del deporte. Hay
muchos ejemplos en nuestro medio, solamente
es necesario observar el ranking o los récords
nacionales de infantiles, de 10 años
retrospectivos, en distancias cortas, y analizar
hasta donde llegaron esos nadadores.
Por otro lado, se encuentran aquellos
entrenadores que someten a los nadadores a
cargas o volúmenes demasiado altos, o
entrenamientos sin ninguna razón técnica ni
fisiológica.
En estas edades los entrenadores muchas veces
comenten grandes errores, exigiendo a los
jóvenes nadadores secciones de entrenamiento
de doble turno durante todo el año, entrenando
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con sobrecarga olvidándose de los elementos
técnicos (Murcia, J. 2022).
Siendo estos errores que justifican los rápidos
resultados obtenidos, o lo que es peor, los
buenos resultados de algunos chicos que poseen
grandes condiciones, y que llegarían igual con
trabajos mucho más coherentes. Pero es posible
que estos excesos los alejen también
rápidamente del deporte, por hastío, fatiga, etc.
Es importante no olvidar que el entrenamiento
es un proceso de continua adaptación. Si se
utilizan todas las armas a edades tempranas,
como o con que se generarán las modificaciones
necesarias para el progreso cuando los
nadadores lleguen a edades adultas (Murcia, J.
2022).
En el otro extremo se encuentran los
entrenadores que los hacen nadar muy poco,
trabajos demasiado cortos para construir una
base que nos permita un buen desarrollo de las
otras capacidades. Además, si a los 12 ó 13 años
no aprende lo que significa entrenar, (disciplina,
continuidad, esfuerzo, sacrificio, etc.) es muy
difícil que más adelante se meta dentro de esa
disciplina deportiva.
Propuesta
Como entrenar la base en las edades
tempranas, su organización y distribución.
El entrenamiento en las edades tempranas debe
estar fundamentado en formas de trabajo
aeróbicas, baja a mediana intensidad y
volúmenes importantes. A su vez el
entrenamiento de base debe responder a las
siguientes reglas:
➢ Formación básica polivalente con
aprendizaje y dominio de las cuatro
técnicas de nado.
➢ Se debe recurrir a formas y métodos de
entrenamiento múltiples y de formación
general.
➢ Adquisición de habilidades técnicas
básicas estableciendo una amplia base
motora.
El objetivo es ir aprendiendo gradualmente a
nadar poco a poco más rápido cada día, mientras
se perfecciona la técnica y se desarrolla el
concepto de ritmo. Es conveniente que a los
nadadores se les pida que nade lo más rápido
que pueda manteniendo un ritmo parejo y
estable, con la menor cantidad de brazadas
posibles. Uno de los factores fundamentales en
este momento es la técnica, en la cual el
entrenador debe hacer hincapié constantemente.
Uno de los problemas es el volumen en metros
a nadar durante el entrenamiento por día ó
sesión. Dentro de ese tiempo establecido lo
ideal no es formar el aumento de una mayor
cantidad de metros posibles, sino que aprenda
adecuadamente la técnica y la aplique mientras
nada. A medida que el niño va progresando ira
aumentando la cantidad de metros que nada en
una sesión. Pero el tiempo que le lleva el
mismo, siempre y cuando sea el adecuado a la
edad, le permite finalizar sin un gran
agotamiento psíquico, y le permitirá realizar
volúmenes importantes, y acostumbrarse a ir
mejorando sus ritmos de nado.
Como una idea orientadora y a los efectos de no
caer en alguno de los errores mencionados
anteriormente se puede establecer que los
tiempos de trabajo para cada edad serían:
Tabla 1 Tiempos de trabajo según el grupo de edad
Grupo de edad
Tiempo
De 8 a 9 años
de 1:00 hora.
De 10 a 11 años
de 1:15 a 1:30 horas.
De 12 a 13 años
de 1:30 a 2:00 horas.
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Por supuesto que esto no pretende establecer
tiempos fijos y rígidos, se debe tener en cuenta
que cada entrenador deberá adaptar la idea a su
criterio, posibilidades, capacidad del grupo,
horarios, etc.
La organización y distribución de los tiempos
de entrenamiento deben obedecer a lo siguiente:
Niños de 8 a 9 años. 1 hora
➢ 10 minutos de entrada en calor.
➢ 30 minutos de trabajo principal.
➢ 15 minutos de pierna o trabajo técnico.
➢ 5 minutos de vuelta a la calma.
Niños de 10 a 11 años. 1 hora y media
➢ 10 minutos de entrada en calor.
➢ 40 a 45 minutos de trabajo principal.
➢ 15 minutos de pierna correctivos.
➢ 15 minutos de brazos o trabajo de
estilos.
➢ 5 minutos de vuelta a la calma.
Niños de 12 a 13 años. De 1 hora 45 a 2 horas
➢ 10 minutos de entrada en calor.
➢ 50 minutos de trabajo principal.
➢ 20 minutos de trabajo de pierna.
➢ 20 minutos de trabajo de brazos o estilo.
➢ 5 minutos de vuelta a la calma.
Dentro de los tiempos estipulados están los que
se tardan en pasar de un trabajo al otro. Es
importante que este no sobrepase nunca los 2
minutos. Si los niños van progresando, a medida
que va transcurriendo el tiempo serán capaces
de nadar mayor cantidad de metros, en un
mismo tiempo Por lo tanto las distintas edades
nadan más metros no solamente porque
aumenta el tiempo de trabajo sino porque su
velocidad es mayor. Los niños de la misma edad
nadarán más metros al final de un año,
manteniendo sus minutos de entrenamiento por
sesión
Un ejemplo de plan de entrenamiento sería una
entrada en calor. Repeticiones de 200 en el
trabajo principal. Repeticiones de 50 en pierna.
Repeticiones de 100 en brazos y vuelta a la
calma.
Estos dos planes de entrenamiento que están en
la Tabla 2 se puede observar que en un mismo
tiempo de entrenamiento los nadadores de buen
nivel recorren 1600 metros más que aquellos
que tienen un nivel inferior. La idea no es que
los dos realicen el mismo volumen, sino que
paulatinamente el grupo inferior vaya entrando
en los tiempos de trabajo del superior y de esa
forma poder realizar el mismo volumen. Por
supuesto que al otro se le continuara exigiendo
más, para que recorra mayor distancia en el
mismo tiempo. Si este concepto se aplica a
todas las formas de trabajo durante el
entrenamiento se reducirá al máximo el tiempo
de demora entre cada ejercicio, permitiendo que
el grupo nadará muchos más metros en el
mismo tiempo
Tabla 2 planes que en un mismo tiempo de entrenamiento en los nadadores
Tipo de entrenamiento
Nadadores de buen nivel
Nadadores de regular nivel
Repeticiones
Repeticiones
Tiempo
Entrada en calor.
700
10'
Trabajo principal.
200 x
18 a 2'45"
14 a 3'30"
49'
Trabajo de piernas.
50 x
24 a 55"
16 a 1'15"
20'
Trabajo de brazos.
100 x
14 a 1'30"
10 a 2'
20'
Vuelta a la calma.
400
5'50"
Totales volumen y tiempo
7.300
5.700'
1.44'50"
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La periodización en la niñez.
Es importante no olvidar que el principal
objetivo es alcanzar el máximo rendimiento en
la edad adecuada.
Para ello una periodización con 2 puestas a
punto chocará con las exigencias escolares y
lleva generalmente a cargas e intensidades
inadecuadas para la edad.
Es más lógico no trabajar con puestas a punto
definidas. Respetar los períodos de recesión
escolar. De esta forma el niño puede disfrutar de
las vacaciones necesarias con su familia, y estos
períodos de descanso le proporcionan la pausa
necesaria para que el desarrollo del
entrenamiento sea adecuado. Donde los
períodos de entrenamiento relativamente
breves, garantizaran fases suficientes de
recuperación y restauración, fundamental en el
organismo de los niños.
En niños de 8 a 9 años es conveniente entrenar
a lo máximo 6 sesiones semanales en la primera
etapa, y agregarle un o dos más en la segunda
etapa, con alto contenido técnico, sobre todo.
En niños de 10 a 11 años se deberá entrenar 6
sesiones en primera etapa y agregarle de 3 a 4
en la segunda etapa. Mientras que los niños de
12 a 13 años deberán entrenar 8 sesiones en la
primera etapa dentro de las posibilidades
lógicas, y de 10 a 11 en la segunda etapa.
Las competencias permiten un control continuo
del efecto de las formas y métodos de
entrenamiento, proporcionando una dirección
óptima en el proceso de entrenamiento.
Tambien sirven sobre todo para diversificar el
entrenamiento y sus exigencias, y para
mantener la motivación. Donde las
competencias no deben perturbar el proceso de
entrenamiento a largo plazo por una
preparación especial.
Conclusión
Después de realizar un análisis se deben
entrenar la capacidad aeróbica en las edades
tempranas. Evitando la sobrecarga de
entrenamientos aeróbica lácticos.
El entrenador debe tener como objetivo
principal la enseñanza de la técnica en estas
edades sumándole la importancia adecuada en
estas edades.
Se debe lograr mejorar la velocidad a través de
una buena técnica y ritmos parejos coordinados.
Así como evitar abusos con las distancias y
tiempos de entrenamiento que se les debe
dedicar a los niños. Entendiendo que el
entrenamiento se debe realizar con miras a diez
o más años, evitando el campeonísimo.
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